por Murphy | Oct 3, 2012 | Variedades
Ese momento en el que redactas un mail en tu maravilloso gmail decorado con muñequitas que comen helados de colores con ojos en cualquier época del año y, en vez de dar a enviar, pinchas en un banner. Pero no, no es un banner cualquiera, NO. Es de esos que te cortan...